Miriam Nicieza acaba de cumplir 61 años, tiene 2 hijas: Carolina (31 años) y Noelia (22 años). Está en pareja con Gabriel desde hace 29 años. Su especialidad médica es el Diagnóstico por Imágenes pediátrico y de adultos, pero siempre centró su actividad profesional en el Diagnóstico por Ultrasonidos.

Comenzó a trabajar en Chivilcoy el 10 de noviembre de 1987 en un consultorio que estaba ubicado en la Av. Soárez 197. En el año 1991 se trasladó a la calle San Lorenzo 379, lugar en el que luego, en diciembre de 2002, se iniciaría Ecodiagnosis.

Chivilcoy Salud dialogó con la Dra. Nicieza acerca de su recorrido en la medicina y del centro de estudios que ella dirige que , en el 2022, cumplirá 20 años.

 

¿Qué la motivó a escoger la carrera de medicina y cuáles fueron sus derivaciones?

 

 

Desde muy chica siempre pensé en ser médica y ya en el colegio secundario al cursar Biología, con mi adorada hermana Virginia en el Colegio Misericordia,supe con certeza que estudiar medicina era mi camino.

Lo que pocos saben es que empecé y me recibí pensando que iba a ser Pediatra. Me recibí a los 23 años, pero por esas cosas que nos tiene deparado el  destino, tuve en el último año una pielonefritis y a raíz de eso perdí la cursada de una de las materias y no me pude recibir en diciembre. Me recibí en mayo del año siguiente (1984) y empecé una concurrencia en el Hospital Pedro de Elizalde, ex Casa Cuna. Allí supe que me había equivocado, que nunca iba a poder ser objetiva, nunca iba a poder separar lo emocional de lo profesional. 

Y llegué a la ecografía acompañando a mi hermana mayor que esperaba su primer bebé. Mientras le hacían la ecografía pensé que podría gustarme. Y a partir de ahí, mi historia.

Pero quiero destacar que en ese camino fui una privilegiada al encontrar cuatro médicos que fueron y son mis guías.

El primero, mi gran profesor, el que me contagió la pasión por la ecografía, al que siempre le deberé lo que soy profesionalmente: el Dr. Carlos Bruguera, pionero de la ecografía en la Argentina, reconocido mundialmente.  Hice el curso de entrenamiento en ecografía que dictaba y al finalizarlo le dije que pensaba que no era suficiente. Se rió. Lo sorprendí y me ofreció quedarme con él.  Lo seguí a todos los lugares en los que trabajaba y día a día me enseñó a amar la ecografía. También me consiguió una rotación de  tres meses   en el hospital Thomas Jefferson de Filadelfia (USA) para completar mi formación. Con los años me convertí, según él,  en una de sus “hijas predilectas de la ecografía”.

El segundo, el Dr. Carlos D´Alotto, pionero en doppler en la Argentina, con el que pude aprender gracias a una invitación del Dr. Rogelio Ventemiglia, recordado cardiocirujano nacido en nuestra ciudad.

El tercero, el Dr. Pedro Weisburd, que estaba convencido que si los ecografistas aprendíamos a ver el corazón fetal y sospechar una cardiopatía congénita, los cardiólogos como él, podrían salvar más vidas al nacer. Lo seguí en tantos cursos que llegamos a entablar una amistad, e incluso eso propició que viniera a Chivilcoy. Aún hoy lo seguimos extrañando en Ecodiagnosis.

Y por último, actualmente, al Dr. Esteban Vázquez, cardiólogo pediátrico y fetal, el sucesor de Pedro, que nos enseña a muchos colegas y hace que lo complejo que nos resulta evaluar el corazón fetal  parezca  fácil, y con el que, en breve, me animaré a cursar la Diplomatura en Cardiología fetal.

Siempre les voy a estar agradecida a los cuatro.

 

¿Qué es Ecodiagnosis para usted?

 

Ecodiagnosis surgió como un proyecto de crecimiento profesional y personal pensando en un futuro que parecía lejano y hoy ya no lo es tanto, mi jubilación. También  fue un proyecto que mucho tuvo de familiar. Gabriel fue el que ideó y me convenció que podíamos hacerlo realidad.  Lo empezamos en Octubre del 2001. Y en diciembre de ese año tuvimos en nuestro país la recordada crisis del 2001. Fue muy duro en todo sentido. Tuvimos que vender nuestra casa, que habíamos construido con mucho esfuerzo. Estábamos ya embarcados y seguimos en pos de un sueño, a pesar de las dificultades. Y de esa etapa “olvidable”,quedan en el recuerdo quiénes te dieron una mano. En mi caso, nunca olvidaré ni dejaré de agradecerle a mi ginecóloga y amiga, la Dra. Daniela Isatis, que durante un año, me ofreció desinteresadamente su consultorio para que pudiera seguir atendiendo. Son gestos inolvidables.

Ecodiagnosis fue pensado y orientado como un Centro de Diagnóstico por Imágenes sobre todo para la mujer. Así incorporamos el Servicio de Mamografía que se sumó al de  Ecografía (general de Adultos y Pediátrica y la de Doppler Vascular periférico y Gineco -obstétrico). También se adicionaron consultorios para la atención de profesionales de distintas especialidades.

Inauguramos la planta baja de Ecodiagnosis el 3 de diciembre (Día del Médico) del 2002. Y de a poco seguimos con la construcción en los años siguientes.

Ecodiagnosis es parte de lo que amo: la medicina y la ecografía, que volvería a elegir y que sigo disfrutando y por la que sigo estudiando aún hoy. Incluso será un lugar que compartiré en unos pocos meses con mi hija mayor, Carolina, que es médica y que eligió a la Ginecología y Obstetricia como su especialidad.

 

 

El diagnóstico por imágenes está siempre relacionado con la tecnología y sus avances. ¿Qué tipo de estudios y con qué alcance se pueden realizar hoy en Ecodiagnosis?

 

Sí. El diagnóstico por imágenes siempre está relacionado con la tecnología y sus avances y en relación a esto, Ecodiagnosis siempre se destacó por contar con aparatología de última generación tanto en el Diagnóstico por Ultrasonidos, como en el Diagnóstico por Imágenes Mamario, a cargo de la Dra. Sarinelli,  en los que actualmente se centran los estudios en Ecodiagnosis.

 

¿Cuáles son los desafíos planteados para el centro en este período de tiempo?

Los desafíos en Ecodiagnosis siempre estuvieron y  estarán enfocados en ofrecer estudios de excelencia y es por eso que a través de los años los pacientes nos siguen acompañando. Ininterrumpidamente, hemos tratado de optimizar la atención de los pacientes, desde el momento en que  solicitan los turnos hasta la atención de los profesionales, contando con instalaciones que hagan agradable el tiempo que  pasan con nosotros.  

¿Cómo ha incidido la pandemia en relación a los estudios de carácter preventivo de la población?

Durante la  pandemia  se plantearon dos escenarios diferentes. Al comienzo de la misma y durante casi todo el  año 2020, los pacientes en su gran mayoría,  pospusieron sus controles preventivos y nosotros también, como centro, en los primeros meses limitamos, en el caso de las ecografías, la atención sólo para urgencias en general y los controles ecográficos obstétricos que nunca se discontinuaron. Hubo que  readaptar la atención al público y administrativa a la modalidad home office, extremando los protocolos tanto para la protección de los pacientes como la de los profesionales y del  personal que trabaja en equipo en Ecodiagnosis. Transitamos, como todos, muchos cambios en el 2020. Pero ya desde el final  del año pasado y en lo que va de este, los pacientes  retomaron sus controles preventivos, asumiendo que con protocolos estrictos, la atención de la salud no debe discontinuarse.

 

 

¿Cómo puntuaría, entre 1 y 10, al sistema de salud en Chivilcoy?

 

No puedo puntuar al sistema de salud en Chivilcoy porque siempre desarrollé mi profesión en el ámbito privado. Pero sí sé del  enorme esfuerzo y sacrificio que están realizando durante esta pandemia todos los involucrados en la salud en los hospitales públicos, desde los médicos, los enfermeros, los técnicos, los encargados de la limpieza, los administrativos,  todos ellos son dignos de un gran reconocimiento.

Desde la esfera municipal también debe reconocerse el esfuerzo y el compromiso, con aciertos y seguramente, por qué no, con errores como nos pasa a todos. 

 

¿Cree que la población valora lo suficiente el esfuerzo del personal de salud durante la pandemia?

Tal vez la población lo valora (aunque  no bastan los aplausos, muchas veces se necesita empatía). Pero el sistema sanitario  está claro que no lo hace. Muchos  no saben que, por ejemplo, a los médicos de los hospitales públicos les suspendieron sus vacaciones desde el principio de la pandemia. Algunos sólo pudieron tomarse una semana. Los médicos y enfermeros están agotados física y emocionalmente. En la primera etapa de la pandemia faltaban elementos de protección, sobre todo para los enfermeros. Aún con toda la desprotección siempre estuvieron y siguen estando.  Un poco de alivio llegó a los que pudieron vacunarse. Pero todos sabemos que el sistema de vacunación que ofrece nuestro país dista de ser programado y eficiente.

Durante esta pandemia el personal de Salud debió ser reconocido, no sólo con palabras y discursos, sino con un aumento más que merecido en sus remuneraciones, cosa que no ocurrió y es muy injusto.  Pero es sabido que la salud no es prioridad para éste ni para ningún gobierno.

 

¿En general, qué tan precavidos somos en relación a nuestra propia salud, según su observación?

Creo que cada vez más la población tiende a la Medicina preventiva incorporando los controles en salud como la forma de detectar, en forma temprana,  una eventual patología. Y parte de esos controles se realizan con estudios por imágenes.